Cuando hemos adelgazado es fácil encontrarse con la pregunta de qué debemos hacer para continuar con nuestra línea y no retomar malos hábitos que nos conduzcan otra vez al sobrepeso.
Para eso os voy a desvelar que hábitos deberíamos adquirir cuando ya hemos adelgazado y no volver de reinicio a lo que tanto nos ha costado alcanzar.
Continuar haciendo actividad física de manera regular
Mantener los hábitos a la hora de practicar la actividad física de manera regular nos ayudará a continuar con nuestro gasto calórico. Según el Colegio Americano de la Medicina del Deporte (2014), lo ideal sería mantener una actividad física regular de unos 200 minutos por semana para no volver a retomar la subida de peso y volver a recuperarla.
Para reducir el peso, ambos sabemos de anteriores artículos que he escrito que el ejercicio físico no puede hacerlo todo, como tampoco la dieta no puede reducir el peso por sí sola. En este sentido hay que decir que habremos de cuidar ambas cosas para seguir manteniendo nuestro cuerpo delgado.
Mantener la ingesta de verduras y frutas
Aparte de aportarnos vitaminas y minerales, nos ayudará al aporte de fibra y a cubrir la saciedad a la hora de comer, además de retrasar la absorción de carbohidratos a la superficie absorbente del intestino y con ello reducir los niveles de glucosa en sangre.
Evitar comer pocas veces al día
Comer pocas veces al día hace que nuestro organismo actué, y no de la mejor forma si lo que queremos es mantener nuestro peso ya conseguido. Como todo proceso en que nuestro cuerpo humano no recibe la dosis de nutrientes que necesita para sobrevivir, nuestro organismo actúa en consecuencia y hace que aumentemos las reservas de grasa en estado de hambruna. El cuerpo es lo suficientemente inteligente para preservar nuestra supervivencia. ¡Seamos más inteligentes que nuestro cuerpo humano!
Consumir un poco más de proteína, pero con cuidado
Se ha demostrado que solamente las dietas con un incremento del contenido de proteína puede ser una estrategia efectiva para mantener el peso. No obstante, hay que tener en cuenta que consumir un exceso de proteína, a la larga puede derivarse en problemas renales y este factor, aunque sea una enfermedad multifactorial, suele estar estrechamente relacionado con la dieta que consumimos (A. Van Baak y C.M. Mariman, 2019 y Grases, Costa-Bauza y M. Prieto, 2006).
Si necesitas ayuda en este aspecto puedes consultarme aquí.
Beber té
El consumo de té se ha demostrado que tiene un efecto positivo en la pérdida y el mantenimiento del peso. No obstante, su efecto es bastante pequeño, pero puede influir como una bebida moderadora para este tipo de casos (Hursel, Viechtbauer y Westerterp-Plantega, 2009).
Aunque hay diferentes tipos de té, lo más recomendable sería adquirir un té que fuera el menos procesado, como es el caso del té blanco o incluso también el té verde.
Además el consumo de té ayuda a tu sistema inmunológico, combatiendo enfermedades y contiene propiedades anticancerígenas, antiinflamatorias, neuroprotectoras, reductoras del colesterol y termogénicas, entre muchas otras (Hayat, et alt., 2015).
No hay nada más poderoso que el hábito
El hábito de tener una vida más saludable, hacer actividad física, tener una dieta equilibrada podríamos decir que es el caballo ganador si lo que realmente queremos es mantener nuestro peso. No hay que olvidar la parte psicológica de todo esto, ya que si no tenemos unos hábitos saludables será difícil a largo plazo mantener el objetivo que habíamos conseguido.
Este artículo va para todos aquellos que se encuentran en esta situación y que ya han conseguido adelgazar. Espero deseo que estas estrategias sean de gran ayuda para todos vosotros.
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Un gran saludo.
Albert Montasell Benítez
Entrenador personal y especialista en pérdida de peso.
Tú naces, tú construyes, tú conquistas. Consigue el cuerpo que deseas.