Antes de empezar a debatir cuál es la mejor dieta para bajar de peso, hacemos un resumen sobre qué consiste la paleodieta y la dieta convencional para bajar peso.
¿Qué es la paleodieta?
La paleodieta comprende aquella dieta donde incluye alimentos ecológicos que antes se comían en el paleolítico. El paleolítico comprende desde hace 2,85 millones de años hasta 12.000 años antes del presente. Según su teoría, este periodo de tiempo donde se han consumido aquellos alimentos que se encontraban en aquella época, ha propiciado que estos alimentos estén muy vinculados a nuestro código genético como consecuencia del consumo de estos a lo largo de millones de años, siendo aceptado y sentándole muy bien a nuestro organismo (Pérez, 2012).
Además, la paleodieta se basa en el consumo de alimentos procedente del 40% de las grasas (mayoritariamente grasas monoinsaturadas y polinsaturadas), 30% procedente de los carbohidratos y 30% proveniente de las proteínas, donde se excluye la leche, los cereales, el pan, el azúcar y los productos refinados, puesto que no se consumían en aquella época (la leche no se consumía en edad adulta) (Otten et alt., 2016).
¿Qué es la dieta convencional?
Por otro lado, la dieta convencional donde se incluye la leche, los cereales y el pan, entre otros, se comprende de carnes y productos bajos en grasa, basándose en el consumo de comida procedente del 55-60% de hidratos de carbono, 25-30% procedente de las grasas y el 15% procedente de proteínas, estableciendo un déficit calórico para perder peso (Otten et alt., 2016).
¿Qué dicen las últimas investigaciones respecto a estas 2 dietas?
Una vez teniendo claro estos conceptos, vamos a revisar científicamente mediante las últimas investigaciones que se han hecho respecto a las 2 dietas, explicando cómo se llevo a cabo el estudio que se realizó para comprobar la efectividad para perder peso comparando las dos dietas:
Principalmente, el estudio se realizó para comparar si la paleodieta y la dieta convencional para perder peso mejoraba la sensibilidad a la insulina y reducían la esteatosis hepática no alcohólica (EHNA), que vendría a ser la acumulación de grasa en el hígado, donde esta está estrechamente relacionada con el sobrepeso y la obesidad (Chalasani et alt., 2012). También se evaluaba la composición corporal, los lípidos en sangre (biomoléculas pertenecientes a las grasas), tejido subcutáneo, entre otros, aunque no era los objetivos principales.
Los sujetos presentes en este estudio se comprendía de unas 70 personas que se presentaban como personas sanas con sobrepeso, incluyendo mujeres con menopausia, donde se excluían aquellas que presentaban como fumadoras, con diabetes, hipertensión, enfermedades coronarias y de tiroides, así como osteoporosis y aquellas que tomaban fármacos.
El modo en que se realizó el estudio fue que se dividieron 2 grupos, los cuáles uno tenía que comer alimentos basados en la paleodieta y el otro grupo intervenía con la dieta convencional para perder peso. Estas 2 intervenciones se realizaban al largo de 24 meses. La evaluación de los resultados obtenidos se realizaba al cabo de 6 meses y después de los 24 meses.
¿Cuáles son los resultados de estas 2 dietas?
Los resultados mostraron que ambas dietas hicieron perder peso en ambos grupos, reduciendo el Índice de Masa Corporal (IMC). En los primeros 6 meses se mostró que la paleodieta reducía en mayor medida la masa grasa en comparación con la dieta convencional. No obstante, después de los 6 meses hasta los 24 meses en total, no se apreciaban diferencias significativas en la composición corporal, a excepción de la masa muscular, donde esta se conservaba más en el grupo de la dieta convencional.
En cuanto los resultados obtenidos respecto a la grasa en el hígado, ambas dietas la redujeron, donde la paleodieta destacó de manera más significativa al cabo de 6 meses.
Por otro lado, la sensibilidad a la insulina se presentó con mucha mejora a los 6 meses en el grupo de la paleodieta respecto al grupo de la dieta convencional, pero finalmente más adelante adquirió valores similares en ambas intervenciones.
Resumiendo, ambas dietas reducen la masa grasa y reducen el peso corporal con la diferencia que la dieta convencional favorece la conservación de la masa muscular en comparación con la paleodieta (Otten et alt., 2016).
Entonces, la pregunta es: ¿cuál es la mejor?
Mi respuesta es que ninguna de las dos no es ni peor ni mejor, simplemente te irá mejor en función del objetivo que tú persigas. Si deseas perder peso y conservar masa muscular, te decantarás por la convencional, en caso contrario, si posees masa muscular suficiente y quieres quitarte esos quilos de más sin importarte la masa muscular que vas a perder, te favorecerá mucho más la paleodieta. Aunque hay que decir que la conservación de masa muscular favorece el gasto calórico en reposo, pero eso es ya otra historia…
Albert Montasell Benítez.
Tu entrenador personal y especialista en pérdida de peso.
Tú naces, tú construyes, tú conquistas. Consigue el cuerpo que deseas.